Los perros son animales que pueden experimentar muchos sentimientos, como el estrés, ansiedad o afecto hacia sus dueños. Sobre este tema se ha escrito mucho material haciendo referencia a la capacidad de amar de los perros. Por tal razón debemos entender que dichos animales son capaces de conectar emocionalmente con los que convives. En este sentido es importante saber si realmente cuentas con el afecto de tu perro. Por eso es importante conocer cuáles son los signos que dan a entender cuál es el vínculo amoroso que existe con tu mascota. Este vínculo emocional es de carácter bidireccional, porque además de que las personas cuidad de ellos, las mascotas pueden mejorar nuestra calidad de vida.
El contacto con el perro con quien existe un vínculo afectivo permite la reducción del estrés y aumenta la sensación de bienestar. En resumen, el contacto con tu perro y su compañía te hace más feliz.
¿Cuáles son esas señales que indican el vínculo emocional con tu perro?
Son varias las señales que demuestran que tu perro realmente tiene un vínculo emocional contigo. Son una forma clara de saber que tu mascota y tu realmente guardan entre si un gran afecto y por eso se preocupan el uno por el otro. Estas señales tan importantes pueden ser las siguientes:
- El perro busca mantenerse a tu lado, pero no en todo momento. Esto puede parecer contradictorio, pero el apego excesivo puede ser una señal de un trastorno en su comportamiento. Algunos animales puede verse afectados con la separación de sus dueños y al verse solos sentir una elevada ansiedad.
Esto se conoce como ansiedad por separación, por eso el síntoma normal es que el perro te busque pero sin necesitar constantemente contigo.
- Tu mascota busca lamerte la boca. Esto se puede considerar como los besos de tu perro, es un comportamiento que heredaron de los lobos.
- Tolera que te acerques a su comida. La mayoría de los perros protegen con mucho celo el lugar donde comen. Por tal razón gruñen cuando se acerca alguien. Si existe un vínculo emocional con su dueño, el perro no lo vera como una amenaza ante su comida.
- Te recibe efusivamente al llegar a casa. Esto sería una prueba muy clara de que existe ese vínculo emocional al que nos referimos entre amo y mascota.
- Roba prendas de ropa impregnadas con tu olor. Es posible que el perro recoja calcetines u otras prendas y se duerma con ellas. Esta es una señal de que tu olor corporal le inspira seguridad y tranquilidad.
- Viene cuando lo llamas de forma natural. Según los adiestradores profesionales un llamado confiable se consigue solo con un vínculo excelente entre perro y amo. Así se determina si quiere ir contigo o por el contrario prefiere hacer otra cosa.
Beneficios de tener un buen vínculo emocional con tu perro
Cuando se comparte la vida con una mascota probablemente aprecias y te gusta la unión que se ha formado entre ambos. Los motivos clave son el amor, el cariño y el sentimiento de protección que se genera hacia tu perro.
Esta relación de afinidad genera beneficios que están claramente establecidos en parámetros fisiológicos. Por eso tener un perro ayuda considerablemente a mejorar nuestra calidad de vida, permite que nos mantengamos en forma. Además, nos hace mostrar más respeto con los demás y nos hace más responsables.
Por tratarse de una relación bidireccional, se tiene que no solo las personas cuidan de su mascota. Ellas tienen una capacidad inmensa para mejorar nuestra calidad de vida. El contacto con un perro con quien existe un vínculo emocional logra que nuestro cuerpo libere oxitócica. Esta es una hormona que se relaciona con el placer.
Por otra parte, se logra una disminución considerable del estrés y se incrementa el nivel de endorfinas. Estas últimas son responsables de la sensación de bienestar.
En el caso de los niños, existen pruebas que demuestran los beneficios de un vínculo emocional entre estos y sus mascotas. Personas que durante su niñez tuvieron contacto con mascotas se muestran más compasivas, amorosas y respetuosas. Esto es muy importante en su crecimiento personal.
Las mascotas de nuestros niños contribuyen con el desarrollo educativo y social de los mismos. Por otra parte, refuerzan la personalidad del niño, los hacen más seguros y los ayuda a asumir responsabilidades. Se incrementa su autoestima, se reduce la ansiedad y el estrés, así como se estimula el compañerismo y la solidaridad.
Para algunos expertos después de sus padres, el vínculo emocional desarrollado entre un niño y su mascota es de gran importancia para su desarrollo. Por esta razón es tan beneficiosa la existencia de un buen vínculo emocional con tu perro.
